La historia del despacho comenzó en 2005 con el socio Rubens Decoussau Tilkian, y en enero de 2011, adquirió una nueva identidad bajo el nombre de Decoussau Tilkian Abogados.
A lo largo de los años, ha crecido de manera sólida y consistente, y es reconocido en el ámbito jurídico no solo por la calidad del servicio personalizado brindado en sus modernas instalaciones, sino también por el alto nivel de capacitación de su equipo, que no escatima esfuerzos para crear soluciones innovadoras, basadas en las necesidades reales de sus clientes en las diversas áreas en las que actúa.
"En un mundo cada vez más competitivo, debemos ser diferentes, estar atentos a los detalles y nunca desistir de encontrar soluciones, conscientes de que, muchas veces, las mejores respuestas pueden estar en las entrelíneas. La fórmula del éxito es el trabajo arduo y minucioso, unido a la perfecta interacción entre cliente y abogado," afirma Rubens Tilkian.